09 agosto 2004

Mi cuadro favorito

Leyendo ayer en Morgia un post sobre la lluvia, aparecía una imagen que me recordó mucho a mi cuadro favorito.



"Pintaremos a los hombres que viven sufriendo y amando", decía Edvard Munch cuando quería criticar y oponerse a las directrices que marcaba el naturalismo en los primeros años del siglo XIX. Comenzó a retratar, atormentado por su propia enfermedad mental, las pesadillas de su tiempo.

Aún hoy, escuchamos el grito. Fue pintado en 1895 y simboliza la angustia y la soledad del hombre. Se le reconoce como "el primer cuadro expresionista" y es uno de los ejemplos más importantes de la llamada "pintura anímica" de Munch.