Las verdades del barquero

Esta mañana he salido a comprar y cuando me encaminaba hacia el supermercado, una niña de no más de 3 o 4 años, de la mano de su madre, me apuntó con su bracito derecho y vociferó a grito pelado "Mira que gordo, mamá". La madre no reprendió a su hija e incluso creo que esgrimió una leve sonrisa.

Este episodio me hizo recordar que la otra noche me encontré en un garito con un "amigo" al que hacía mucho que no veía y que ciertamente estaba pasado de whiskies y no tardó mucho en soltar la típica bromita de "de cuantos meses estás", a lo que yo siempre respondo "ya he salido de cuentas".

El colmo ha sido cuando he vuelto de comprar. Había visita en casa, un amigo de mi progenitor, y casualmente tambien estaba tomando cervezas. El comentario esta vez es "cuanto te has engordado ultimamente" ...

Pues si los niños y los borrachos dicen que estoy gordo, va a ser que es verdad ... Ustedes ya sabian que lo estaba, que luego no digan que les oculto cosas ...

PD: Queda pendiente un post sobre lo guay que es ser un fofo en esta sociedad que nos ha tocado vivir ... sin proponermelo mucho será el post más largo de todo el blog. Ya veremos si me pongo a ello o lo dejo estar ...