El verdadero objetivo

Mi dilatada experiencia como usuario de transportes públicos en Madrid y periferia me dicta que, el primer objetivo a la hora de entrar en un tren, metro o autobus en hora punta (o sea, a casi todas horas) no será, en ningún caso, conseguir sentarse. Ni siquiera conseguir un buen sitio de pie para apoyar la espalda y tener las dos manos libres para pasar el periódico. En último extremo, tampoco será un objetivo válido evitar que te roben la cartera o el móvil.

El único y vital objetivo es poder respirar ...