24 febrero 2005

Costes de oportunidad

Hay veces que las oportunidades pasan por delante de tu cara y ni te das cuenta. Otras veces te das cuenta pero las dejas marchar. Y otras las aceptas y luego te llevas una decepción. No se en cual de las tres categorías estoy ahora mismo. Tengo 24 horas para decidir si acepto o no un trabajo. No es el mejor trabajo del mundo, tiene una duración finita y no tiene pinta de ser el trabajo de mi vida. Tampoco es que tenga que ver mucho con mis conocimientos, ni siquiera sé si es lo que más me conviene. Para más inri, es seguro que al principio me generará algo de estrés. Pero es un trabajo y el coste de oportunidad de aceptarlo es relativamente bajo. Lo discutiré con mi almohada, que es mucho más analítica y pragmática que yo, y mañana tomaré una decisión (eso que tanto me cuesta hacer ...).