Embarazos laborales

Mi compañera de trabajo está embarazadísima y próximamente desaparecerá muchos meses de la oficina. Sin ánimo de parecer egoísta, machista o muchos adjetivos más que acaban en -ista, y con mis felicitaciones por el nuevo retoño que vendrá al mundo, tengo que decir que el marrón que se me presenta es de padre y muy señor mío. El departamento lo llevamos los dos y obviamente la sustituta que me pondrán, que solo será a tiempo parcial por eso de ahorrar costes, no cubrirá ni de lejos todas las carencias a corto plazo, sobre todo en un periodo tan convulso como el cierre del ejercicio.

De cara al cliente hay que dar la impresión de que todo va a ir sobre ruedas, pero yo tengo alguna duda. Que no se entienda mi queja como un ataque a la familia ni a la procreación conciliadora con la vida laboral. Nada más lejos de mi intención. Simplemente constato que, como en tantas otras ocasiones, el que sale perdiendo en esta historia es el que suscribe, más que nada porque me voy chupar todos los temas que llevaba mi compañera de golpe y porrazo, porque "el trabajo tiene que salir".

[Mode Ironic ON] Voy a tener que pensar seriamente en hacer lo que hace todo el mundo, casarse y tener hijos. Los 15 días libres de ambos acontecimientos son muy golosos [Mode Ironic OFF]...