La auditoría
Para el gremio de los administrativo-contables, la auditoría es el examen final del curso. Y ya se sabe lo duros que pueden llegar a ser esos exámenes. La dinámica es bien conocida: Dos tipos con traje, portátiles y un maletón de papeles se te meten en el despacho durante 15 días y comienzan a ametrallarte, sin compasión de ningún tipo, con peticiones de documentación, preguntas y más preguntas, explicaciones de porque has contabilizado esto así o asá, conciliaciones variopintas y propuestas de ajustes que te hielan la sangre.
Las consecuencias de este periodo son las clásicas: incremento del estrés, mucho más trabajo y el archivo hecho unos zorros. Mi particular infierno auditil ha comenzado ayer y durará hasta el proximo 10 de julio. A atarme los machos se ha dicho. Menos mal que salgo a las 15:00 h., sino sería muy heavy metal.
Etiquetas: auditores, cuentas, desencantos, oficina, trabajo
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