Contradicción sabatina
Puede resultar contradictorio encadenar en una misma frase los conceptos "madrugar un sábado" y "disfrutar", pero es absolutamente cierto que muchas veces cumplo con la sintaxis. Para el común de los mortales, madrugar un sábado significa trabajar un sábado y eso tiene poco de disfrute y mucho de dolor. Pero en mi caso, que no trabajo pero sí me despierto muy pronto por culpa de los malditos biorritmos, todo se ve desde otra perspectiva.
Lo que un día normal es estrés y agobios de reloj, se convierte en un pausado transcurrir del tiempo, que te permite ver amanecer, hacer cucharita con la Sra. Bedel si se tercia, sacar al perrón sin prisas, preparar un desayuno en condiciones, estar un rato a las teclas sin las premuras del día normal y, en definitiva, disfrutar de estos momentos, sin duda para mí los mejores de la semana.
Todo tiene, de todas maneras, su lado negativo. Y es que por la noche me voy durmiendo por los portales. Pero que le vamos a hacer, me estoy haciendo mayor.
Etiquetas: contradicción, disfrute contenido, fin de semana, sábado
2 Comments:
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Sólo hay una forma de unir placer con sábado y levantarse temprano; hacerlo "trempado", ups,...jajajajaja
Publicar un comentario
<< Home