La ducha de Kaiser

Nuestro Kaiser va a asistir mañana a su primera sesión de peluquería. Me parece que la peluquera canina va a tener mucho trabajo con él, porque este chucho se mueve más que los precios. En cualquier caso, la idea de la Sra. Bedel es hacerle un corte de pelo clásico de Westie y dejarlo monísimo de la muerte. A mi la verdad me gusta más el pelo salvaje que tiene ahora, pero bueno, al fin y al cabo es un Westie y tendrá que parecerse a un Westie, digo yo ...

En cualquier caso es obligatorio, antes de pasar por las tijeras, un buen lavado y acicalado. Hoy mismo hemos procedido a ducharle como se merece. Este es el resultado:

La verdad es Kaiser se porta bastante bien en la ducha. Salvo algún que otro movimiento imprevisto, se queda bastante quieto y aguanta estoicamente el jabón y el agua.

De vez en cuando, eso sí, le da por beber el agua de la propia ducha, no exenta de algo de jabón. Pese a nuestra insistencia en que no la beba, se da unos buenos tragos. Lavado de estómago gratuito.

Aunque lo más gracioso de la ducha del chucho es el aspecto que tiene con el pelo empapado. Se parece más a una salchicha alemana blanca que a un Westie.

En fin, 10 minutos que dan para mucho. Al final tanto la Sra. Bedel como servidor acabamos más empapados que el propio cachorro, pero sin duda es un momento divertido.