20 agosto 2010

Niños

Hay un método infalible para contrarrestar las ganas de tener niños en parejas de treinta y tantos, como la contraria y el que suscribe. Y lo hemos vuelto a probar estas vacaciones con resultados inequívocos. Nos dejaron una hora a cargo de los hijos de mi prima, un niño de seis años de edad y una niña de cuatro. Estuvimos en un parque infantil. Infierno total. De largo, la hora más estresante de todas las vacaciones. Cuando se los devolvimos a sus padres, que me agradecieron infinito que nos quedáramos una hora con las criaturas, pensé que cuidar niños ajenos es el mejor anticonceptivo natural que existe.



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6 Comments:

At 20/8/10, 9:21, Blogger Gratistotal said...

suscribo!

 
At 20/8/10, 9:50, Anonymous Scinx said...

Discrepo,...

 
At 20/8/10, 10:06, Anonymous María José said...

Ay, si yo hubiera tenido una prima jejejeje
Son modos distintos de vivir, eso que dicen de que cambia la vida es absolutamente verdad.Yo soy mamá de una criatura, y aqui nos plantamos por ahora y por mucho tiempo.Es lo mejor que me ha pasado, lo más bonito, quien te alegra la vida pero hay cosas de las que te tienes que olvidar.

 
At 20/8/10, 10:08, Blogger Boro said...

Eso para que te des cuenta de todavía podría ser peor. Con el perrón ya vais tirando. :)

 
At 20/8/10, 10:56, Blogger Poliwhirl said...

Suscribo y discrepo a la vez.

A mí no me gustan en particular los niños, y menos en manada, igual que no me gusta en general la gente. Pero al igual que con la gente, hay niños que molan.

La gente se me escandaliza bastante cuando digo que me gustan más los animales que los niños. :D Por suerte lo achacan a eso de ser extranjera.

 
At 20/8/10, 11:07, Anonymous Sergio Gómez said...

pues yo lo probé... no me funcionó... y no sabes cuánto me alegro... ;)

 

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