Sí. Llegó el día. Ya es oficial. El 4 en el marcador. Enhorabuena a los premiados!. Tenía que llegar, y lógicamente me alegro mucho que así sea porque, con momentos más o menos buenos, más o menos reguleros, seguimos al pie del cañón y eso siempre es una excelente noticia.
Pero entrar en el cuarenterismo tiene sus cosas. Igual que cuando llegó la treintena, se vivió la consabida crisis (con mucho mi post más visitado y comentado), con los cuarenta la cosa comienza a ponerse raruna. No es que dejes de ser joven para ser adulto. Es que pasas de ser adulto a madurito interesante. Y eso en el hipotético (muy hipotético) caso que seas interesante :-). También te das cuenta, aunque ya lo barruntabas, que, en el mejor de los escenarios probables, estás a la mitad del camino. Y eso en un agnóstico radical (o ateo moderado) como el que suscribe, da que pensar.
Pero tampoco vamos a convertir este post, que debe ser festivo, en una plañidera de desencanto y de sesuda filosofía de mercadillo sobre la que se me viene encima. Soy plenamente consciente de la jugada, y no voy a tomar ninguna carta en el asunto de momento. No adoptaré posiciones "hard", tipo Kevin Spacey en American Beauty, tampoco me compraré un deportivo porque no tengo un guil ni me apuntaré a un gimnasio para levantar pesas porque sinceramente tampoco creo que aguantara mucho. Evitaré en lo posible comenzar a hacerme preguntas del tipo, ¿Que coño hago yo aquí?, ¿A donde quiero ir?, ¿De donde carajo vengo? o ¿Es esto lo que quiero o necesito?. No creo que en el momento actual sea oportuno reflexionar sobre estos particulares, porque me conozco y sería peor el remedio que la enfermedad.
El plan es muy sencillo, y a la vez muy complicado. Seguir respirando, seguir en el camino, seguir con los que me quieren y seguir con los que quiero. Lo demás deberían ser lentejas.
Y después de los párrafos divagadores, que os podíais haber saltado perfectamente pero que eran esperables en un post como éste, llegan los agradecimientos. Muchas gracias a tod@s los que me seguis leyendo por esta bitácora pequeñita y perdida de la blogocosa, que se resiste a echar el cierre, por vuestro apoyo y seguimiento. Sois Jrandes!. Gracias también a todos los que me seguís en el dospuntocerismo por tanta felicitación, a esos 1.150 followers de Twitter y a los 375 amigos que a día de hoy tengo en Facebook (muchos se repiten ojo :-D) y gracias a mis amigos unopuntoceristas (que también los tengo y muy buenos) por compartir conmigo el evento de celebración con unas cervezas, unas raciones y lo que se tercie.
Y si alguien ha conseguido llegar hasta aquí, se merece un trozo de esta tarta. No, la contraria no me la ha hecho, pero es un reto para el año que viene :-)
R2D2 cake. visto en Tartas con magiaEtiquetas: castañas, crisis de los 40, cumpleaños, divagaciones, filosofía barata